Nuestro Colegio promueve un estilo de formación que favorece el desarrollo integral de la persona, en todas sus dimensiones: moral social, afectiva, intelectual, religiosa, física y artística, proporcionándoles una sólida formación académica y en valores que le permitan un análisis crítico, responsable y creativo de la realidad social en que vivimos, como manifestó nuestra fundadora “…formar los corazones (…) y hacerles abrazar la práctica de las virtudes cristianas que Nuestro Amo, el Corazón de Jesús vino a enseñarnos…”

“Fundadores, Hoy, Ayer y Siempre. Tomo II Madre Catalina 546, 1894

Es nuestro deseo lograr…

•    Formar los corazones de cada persona de la comunidad educativa a semejanza del Corazón de Jesús, restaurando la imagen de Cristo en los hermanos.
•    Consolidar la formación de hábitos, valores y virtudes  tendientes a lograr el crecimiento armónico en  las diferentes dimensiones de la persona.
•    Promover los valores de la caridad fraterna, libertad, respeto, solidaridad y tolerancia; reflejándolo en actitudes de entrega, reparación, esfuerzo, generosidad, paciencia, aceptación y escucha.
•    Estimular sentimientos y actitudes que tiendan a la valoración de la familia como núcleo fundamental.
•    Animar el aprendizaje desde una pedagogía reparadora.
•    Incentivar el espíritu de investigación, experimentación y conocimiento de la naturaleza para transformarla en bienes culturales.
•    Fomentar el conocimiento crítico de las costumbres, tradiciones y valores que conforman nuestra realidad nacional y latinoamericana.

Responsables de la Educación

Nuestro Colegio se construye como Comunidad Educativa porque exige el trabajo coordinado de todas las personas que intervienen: La Comunidad Religiosa, el Personal Directivo, Docentes, Auxiliares, Administrativos, de maestranza y de servicios, Padres, Alumnos, Ex-alumnas y Ex-alumnos.
Además, se cuenta con el apoyo del Departamento de Orientación, integrado por un equipo de Psicólogas y Psicopedagoga.

Nuestro Colegio promueve un estilo de formación que favorece el desarrollo
integral de la persona, en todas sus dimensiones: moral social, afectiva, intelectual, religiosa, física y artística, proporcionándoles una sólida formación académica y en valores que le permitan un análisis crítico, responsable y creativo de la realidad social en que vivimos, como manifestó nuestra fundadora “…formar los corazones (…) y hacerles abrazar la práctica de las virtudes cristianas que Nuestro Amo, el Corazón de Jesús vino a enseñarnos…”